Preeclampsia: Lo Que Necesitas Saber Y Preguntar
La preeclampsia es una condición que generalmente se desarrolla después de aproximadamente 20 semanas de embarazo y a menudo se define por los siguientes síntomas principales: la presión arterial alta sin precedentes y la proteína en la orina. La conciencia de esta condición es importante, ya que se ve en aproximadamente 1 de los 25 embarazos y puede ser grave si no se trata.
Aunque la preeclampsia se caracteriza en gran medida por los dos síntomas mencionados anteriormente, hay varios otros síntomas que pueden estar asociados con él como dolores de cabeza persistentes, visión anormal, dolor abdominal superior, hinchazón no natural, aumento de peso repentino, dificultad para respirar y náuseas y vómitos.
El único tratamiento absoluto para la preeclampsia es la entrega y dependiendo de qué tan lejos esté en su embarazo, esto puede ser apropiado. Si la entrega no es una opción, su médico mantendrá un monitor cercano de su embarazo, puede iniciar el tratamiento médico y posiblemente prepararse para una entrega temprana.
Se cree que la preeclampsia es causada por el desarrollo anormal de los vasos sanguíneos uterinos y el flujo sanguíneo ineficiente a la placenta, lo que podría frenar el crecimiento del bebé o conducir al parto prematuro.
La preeclampsia también puede ponerla en riesgo de enfermedades posteriores, como el síndrome de HELLP y la eclampsia, que puede provocar daño o los órganos o iniciar convulciones. También se ha demostrado que la preeclampsia aumenta el riesgo de enfermedad cardiovascular.
La buena noticia es que puede tomar medidas durante su embarazo para reducir sus riesgos de preeclampsia.
Primero, el cuidado prenatal adecuado es absolutamente crucial. Parte de esto significa que asistió constantemente los chequeos para que su médico pueda detectar las anomalías al principio. Además, asegúrese de hablar con su médico en estas citas: sea honesta acerca de cualquier inquietud o síntomas que pueda tener. Siempre es mejor estar en el lado seguro de las cosas.
La atención prenatal también significa priorizar su salud física: una dieta nutritiva y un ejercicio regular son vitales, ya que no solo disminuyen su riesgo de presión arterial alta, sino que hacen lo mismo por las consecuencias cardiovasculares que puedan surgir. Las investigaciónes han demostrado que los cambios en la dieta, como minimizar la ingesta de sal y cafeína, podrían ser útiles.
Las investigaciónes también han demostrado que para algunas mujeres que toman la aspirina de dosis bajas todos los días podrían disminuir el riesgo de preeclampsia por 15%, aunque le recomendamos que consulte con su médico antes de hacerlo.
¿Estás planeando hablar con tu médico sobre este tema? Aquí hay 3 preguntas que le puede preguntar:
- ¿Estoy en alto riesgo de preeclampsia?
- ¿Recomiende que tome la aspirina de dosis baja para ayudar a prevenir la preeclampsia?
- ¿Hay alguna anomalías con mi presión arterial o orina que debo saber?